¿Quién no ha comido de tupper alguna vez? Con el ritmo acelerado de la vida y los horarios laborales, cada vez es más frecuente llevar la comida preparada al trabajo en un tupperware.
Sin embargo, del mismo modo que todos sabemos que una botella de plástico no se debería reutilizar muchas veces, ni poner a altas temperaturas, con los taper no es exactamente igual (sí como véis se pueden utilizar distintas palabras para hablar del mismo recipiente, depende del idioma en el que lo usemos).
Por eso hemos elaborado una lista para que evitéis cometer ciertos errores en la elección y uso de estos portables recipientes y poder evitar los efectos nocivos para la salud que pueden provocar.
Los más extendidos y populares son los de plástico por su facilidad a la hora de trasladarlos, y su bajo precio, pero también los hay de vidrio (mucho más adecuado) y de cerámica, utilizados mayormente para almacenar en casa.
Una de las claves es conocer la información que contiene el recipiente. En la parte baja del bol podemos encontrar una numeración del 1 al 7 rodeada de tres flechas formando un triángulo.
En caso de utilizar tuppers de plástico para calentarlos en microondas, los más indicados serán aquellos con la numeración 2, 4 o 5.
Los que hay que evitar a toda costa, son los del tipo 7. Estos pueden desprender bisfenol, un componente hormonal. Esta sustancia química puede afectar a la salud reproductiva de hombres y mujeres y a aquellos órganos relacionados con las hormonas.
Estas partículas, con altas temperaturas, se desprenden de los envases de plástico, aluminio, latas, papel térmico o sartenes antiadherentes.
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