Qué no debes hacer a la hora de cocinar croquetas
El mundo de las elaboración de croquetas tiene muchas más cosas a tener en cuenta de lo que la gente puede pensar, y os lo decimos nosotros que somos una empresa especilizada en el mundo croquetero para particulares y para los restaurantes.
Es importante a la hora de cocinar este aperitivo, seguir bien los pasos de las recetas de croquetas caseras que queramos elaborar, ya que desde el primer paso hasta el último, podemos ir cometiendo una serie de errores que pueden echar al trate todos nuestros esfuerzos.
Desde Croquetas Ricas siempre ponemos atención en todo el proceso de elaboración de nuestras croquetas artesanas y por ello además de contar con ingredientes de calidad y natural, empleamos a personal experimentado en cocinar este delicioso manjar caliente.
Así que si eres de los que no te apetece estar cocinando siempre, puedes entrar en nuestra tienda online de croquetas y realizar un pedido (recuerda que servimos a particulares dentro de la Comunidad de Madrid).
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Pero vamos a entrar en materia de lo que realmente nos interesa en este artículo, y no es otra cosa que hablar de lo que no debemos hacer a la hora de cocinar croquetas caseras.
Los 6 fallos más comunes a la hora de hacer croquetas
Ten en cuenta que estos errores cuando se cocinan croquetas gourmet, que te comentamos son cosas que les ocurren a muchas personas, y por lo tanto, consideramos que debes estar atento a ellos para no quedar mal con los tuyos (recuerda que Croquetas Ricas, estará allí cuando necesites las mejores croquetas de Madrid).
1.- No utilizar ingredientes de calidad y naturales
Puede que a alguno no le parezca importante, pero cambia mucho el sabor de una buena croqueta en función de los ingredientes que se usen (mantequilla, leche, harina, etc).
Las cosas con mimo y con buenos condimentos saldrán siempre exquisitas a nada que pongamos un poco de empeño.
Solo tenéis que probar cualquiera de nuestros 5 sabores para comprobarlo (jamón ibérico, boletus, queso azul, bacalao y nuestra croqueta de zanahoria, puerro confitado y dátiles). Nosotros estamos en continua mejora de nuestra receta artesanal de croquetas.
2.- Las croquetas no tienen la misma forma
Siempre hay que intentar dar forma a las croquetas de manera uniforme, es decir que sean prácticamente idénticas.
Se debe conseguir que sean del mismo tamaño y como ya hemos dicho, su aspecto debería de ser similar (aunque sabemos que nunca van a ser 100% simétricas).
Para ello existen 3 formas que nosotros recomendamos a la hora de hacer una buena croqueta:
1.- Utilizar una manga pastelera: meterías la masa dentro de este e irías elaborándolas poco a poco.
2.- Con un molde: como si hicieses una tarta, y luego solo tendrías que hacer cortes con un cuchillo.
3.- Con 2 cucharas (hay que ser un poco hábil para ello, pero se puede hacer).
4.- Utilizando las manos: tan fácil como bolear las croquetas con las palmas de nuestras manos (no olvides lavarte bien las manos antes de darles forma).
2.- Croquetas duras o blandas, no gracias
Si cuando mordisqueas una croqueta la masa está dura o blanda, el error estará en la elaboración de la bechamel.
Está bastante claro que esta mezcla, no está bien elaborada y para poder corregirlo, cuando hagas esta salsa, un truco que puedes utilizar para saber si está hecha, es que esta debe despegarse de los laterales de la sartén (así sabrás su grado de cocción).
3.- Croquetas frías por dentro o crudas
Imagínate que tienes mucho hambre, se acerca alguien con un plato de croquetas recién hechas, en un día frío como los que están saliendo en esta época del año, te da una y al morderla, ¡zas! está toda la masa fría y cruda.
Es una de las peores pesadillas de los croqueteros.
¿Cómo solucionalo? Deja que las croquetas se descongelen a temperatura ambiente durante un rato antes de freírlas.
4.- Se te queman las croquetas
La temperatura del aceite es uno de los factores fundamenteales a la hora de freír unas buenas croquetas caseras.
Es imprescindible conseguir una temperatura de 180º o similar y sobre todo no meter muchas a la vez, ya que como hemos mencionado en otras ocasiones, las croquetas al igual que las personas, necesitan su espacio vital.
5.- Cuidado con el rebozado de las croquetas
Importante, ya que esto es un error que puede también echar al traste con tus croquetas.
El rebozado de una croqueta se elabora con huevos, pan rallado y harina. Dependiendo de cada uno, se suelen seguir distintas pautas a la hora de rebozar este aperitivo caliente.
Como ya explicamos en uno de los post de nuestro blog, se puede hacer así:
- Hay que ponerse un poco de harina en las manos. Después, pasamos las croquetas por huevo batido, un poco de harina, pan rallado y las fréímos en una sartén con abundante aceite.
- Otro rebozado sería utilizando solo huevo batido y pan rallado.
6.- Las croquetas se te abren al freírlas
Siempre que te ocurra esto, es por la temperatura del aceite. Si este, no está a con la intensidad suficiente de calor, se te abrirán poco a poco, y seguramente te empezará a saltar el aceite.
Si te parece complicado elaborarlas y quieres ahorrar tiempo en tu cocina, somos especialistas en croquetas y nos las puedes pedir por aquí.
Ah y si te gustan las croquetas plant-based (100% vegetales), también estás de suerte.
Los mejores consejos de expertos cocineros a la hora de hacer croquetas
Hemos consultado a algunos de los mejores restaurantes del mundo con estrella Michelin, y en particular queremos agradecer al Asador Etxebarri ubicado en Atxondo (Vizcaya), que haya accedido a nuestra consulta, también a Martín Berasategui por su colaboración y al restaurante Echaurren.
Les preguntamos 2 cosas muy sencillas, para hacernos una idea de cómo hacer una buena croqueta. Y según su prestigioso chef Víctor Arguinzoniz y su equipo (que se encuentran en el décimo lugar en la clasificación mundial de los mejores restaurantes del mundo) nos han comentado lo siguiente:
El secreto de una buena croqueta es utilizar ingredientes de calidad, trabajar muy bien la masa, tener mucho cuidado con la harina y tener siempre unas temperaturas adecuadas en el aceite.
Otro aspecto interesante que les preguntamos era sobre los mitos de las croquetas, y nos comentaron que para ellos, el mayor mito es el siguiente:
La mejor croqueta es la de mi abuela.
El secreto es hacer una buena bechamel, esto es esencial, ni demasiado líquida, ni demasiado gruesa, en su punto. La croqueta al morderla debe ser untuosa, sedosa, con sabor. También es muy importante que el producto con el que vamos a hacerlas sea de buena calidad, si las hacemos de jamón debemos poner en la mezcla un buen jamón ibérico o cocido, y en cantidad. Y ocurre lo mismo con el resto de ingredientes, debemos utilizar buena mantequilla, excelente aceite de oliva, buena cebolleta picada para hacer un sofrito al comienzo, y la leche debe ser entera, con todo su sabor, para que la bechamel resultante sea cremosa e intensa de sabor.
Un error es no freírlas en la temperatura adecuada o no descongelarlas bien antes de freírlas, en caso de que tengamos croquetas congeladas. Si no las freímos en caliente y abundante cantidad de aceite de oliva, el rebozado no queda crujiente y por dentro no quedan cremosas.
El secreto de una buena croqueta es que no sepa a harina, que el exterior sea una costra fina y crujiente y que la masa sea fluida y muy sabrosa - Restaurante Echaurren.
Mitos o errores de las croquetas: El momento más importante para las croquetas fue cuando dejaron de verse como un plato que se elaboraba con las sobras de comidas anteriores, cuando se comenzaron a preparar con buenos productos comprados expresamente para ese menester. Ahí fue cuando la croqueta adquiere la importancia que ahora tiene. Es un plato muy representativo de nuestra cocina - Restaurante Echaurren.
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